Lexorbe Abogados se había constituido formalmente como bufete para poder operar con clientes y necesitaba una web comercial que pudiera transmitir sus servicios y poder ser contactados por futuros clientes. El reto fue cumplir los objetivos del cliente con un presupuesto muy reducido. Tras reunirme con el cliente y tras hacer un benchmarking y roadmap ajustado a su presupuesto, les hice un breve resumen de las diferentes posibilidades a la hora de elaborar su web y los costes y entregas que suponían. Trabajé desde el principio la propuesta de valor, para que tuvieran el reflejo que su trabajo no estaba dejándose de lado por otros proyectos de mayor envergadura. El contacto con el cliente para la transmisión y arquitectura del contenido fue constante.